Desde tiempos inmemoriales, el teatro ha sido un escenario para explorar los aspectos más profundos y efervescentes de la condición humana. En este vasto panorama de la dramaturgia, el Siglo de Oro español resplandece como una época dorada de la creación teatral, y entre sus luminarias destaca la figura imponente de Pedro Calderón de la Barca. En el vasto repertorio del dramaturgo se encuentra una joya poco conocida pero ahora recuperada por la Compañía Nacional de Teatro Clásico: "El monstruo de los jardines".
Este estreno absoluto, que ha sido puesto en escena en el Teatro de la Comedia de Madrid desde el pasado 5 de abril, es una obra que destila la esencia misma del teatro calderoniano: una combinación exquisita de mitología, intriga, humor y poesía. Dirigida y versionada por Iñaki Rikarte, quien ya ha dejado huella en la escena española con sus trabajos previos, este montaje es un festín para los sentidos y la inteligencia.
El elenco, conformado por jóvenes talentos provenientes de la Joven Compañía Nacional de Teatro Clásico, demuestra un gran dominio escénico. El elenco está formado por: Íñigo Arricibita, Xabi Caudevilla, Cristina García, Ania Hernández, Nora Hernández, Antonio Hernández Fimia, Pascual Laborda, Cristina Martín Miró, Felipe Muñoz, Miriam Queba, María Rasco y Marc Servera, que dotan de vida y frescura a los personajes de esta comedia mitológica. Es la culminación de un proceso de formación y crecimiento artístico que se inició con la exitosa gira de "La discreta enamorada", dirigida por Lluís Homar, y que ahora alcanza nuevas cumbres con "El monstruo de los jardines".
La trama de la obra nos sumerge en el contexto de la guerra de Troya, un escenario cargado de heroísmo y traiciones. El oráculo de Marte dictamina que sin la participación de Aquiles, los griegos no alcanzarán la victoria. Pero la madre del héroe, la diosa Tetis, decide ocultarlo disfrazado de mujer en el palacio del rey de Egnido para protegerlo de un destino fatal. Esta premisa da lugar a un enredo de proporciones épicas, donde la astucia de Ulises se enfrenta al ingenio de Tetis en una batalla de voluntades que desemboca en situaciones hilarantes y emotivas.
Lo que hace que "El monstruo de los jardines" sea una obra tan excepcional es su capacidad para conjugar la grandiosidad del mito con la cotidianidad del drama humano. Calderón nos presenta a dioses y héroes, pero también a seres vulnerables y apasionados que luchan por sus deseos y convicciones. La riqueza de los versos calderonianos, su musicalidad y su profundidad filosófica se entrelazan en cada escena, invitando al espectador a reflexionar sobre el sentido de la existencia y el poder transformador del amor y la libertad.
En palabras del propio director, "El monstruo de los jardines" es un tesoro por descubrir que revela la grandeza y la diversidad del Siglo de Oro español. Es una obra que sorprende por su vigencia y su relevancia en el contexto contemporáneo, donde los conflictos bélicos y las luchas por la identidad siguen resonando con fuerza. Pero también es un homenaje al poder del teatro como espacio de encuentro y celebración de la vida en todas sus facetas.
Sobre los elementos escénicos, el director afirma que «La obra sucede en los prolegómenos de la guerra de Troya, pero nos parecía que llevarlo históricamente a ese tiempo remoto colocaba la idea de la guerra en un plano romántico, rebajando su crudeza. Por este motivo, tratando de llevar la función a un lugar más concreto y reconocible por el espectador, hemos trabajado con la década de los 50 y 60 como punto de partida para la utilería, el vestuario y la música, aunque no hemos permitido que esta elección nos limite, pues la propia obra original y en general las del Siglo de Oro, muestran un gran eclecticismo». También siguiendo esta línea se han intentado incorporar o recoger los antiguos elementos de tramoya traídos por escenógrafos italianos a la corte en el siglo XVII, por medio del trabajo de Mónica Boromello, heredera del trabajo de aquellos escenógrafos y que ha construido una escenografía móvil que tiene mucho que ver con la rueda de la Fortuna, la rueda de la vida, ya que en esencia la obra es una lucha contra el destino.
© C. Meléndez
El monstruo de los jardines es una producción de la CNTC que estará en cartel en el Teatro de la Comedia hasta el 26 de mayo.
Fotos de escena : © Sergio Parra
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