Trato de favor es la última producción del Teatro de la Zarzuela, un estreno absoluto que se presentó hace unos días. La obra dirigida por Emilio Sagi está escrita por Boris Izaguirre y su música compuesta por el joven Lucas Vidal. El teatro la ha definido como una zarzuela contemporánea, aunque es más bien una mezcla de géneros que hace guiños al teatro musical e incluso si me apuras a la opereta, pues el libreto de Boris es divertido, inverosímil y ligeramente dramático en algunos momentos.
El elenco, constituido casi exclusivamente por mujeres, sólo hay un hombre en el reparto, Enrique Ferrer que interpreta el personaje de Juan Miguel, está encabezado por la Soprano Ainhoa Arteta en el personaje de Ana Mía, la diva que ingresa en la cárcel de Las Albricias y que llevará a los espectadores a un viaje al imaginario del absurdo que acaba rematándose con una intervención en el Festival de Eurovisión desde la misma cárcel, presentado por el propio Boris Izaguirre desde el pasillo central del patio de butacas.
La escenografía que ha corrido a cargo de Daniel Bianco, en la que será su última intervención como Director General del Teatro de la Zarzuela, puesto en el que cesará al término de la temporada, es realmente magnífica.
Gurutze Beitia, interpreta el papel de Mercedes, enamorada de Ana Mía al igual que Juan Miguel; Nanci Fabiola Herrera es Mayka, la corrupta directora de la prisión que intenta lucrarse con la llegada de la cantante; y Amelia Font, María José Suárez, Amparo Navarro y Lara Chaves forman el grupo de presas que pondrán el toque de humor y de humanidad en la obra. Dirige la orquesta con muy buena batuta Andrés Salado y la coreografía es de Nuria Castejón.
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